A sabiendas de que son muchos los lugares en donde se ha hacho lectura comunitaria de su 'Libro de la Vida', y ahora 'Camino de Perfeccion' (y muy bien organizados) nos parece apropiado dedicar este espacio a recordar a Teresa, en su encanto y su figura! Su sentido de la practicidad, su determinacion, su alegria, su carisma, su doctrina...en fin, todos los atributos con que nuestro buen Dios la engalanó y en ella, a todos sus hijos, y a la Iglesia toda. Todo ello, y lo que llevamos en el corazon, como acompañamiento y aporte a este Camino hacia el V Centenario de su Natalicio. Algo así, como una andadura fraterna y gozosa, en la que todos sus hijos, hablando de ella, hacemos que su recuerdo nos refresque el alma, mientras llegamos juntos a Su Fiesta!

ABRAZO EN JMJT!

sábado, 30 de abril de 2011

Amante de la lectura desde su niñez, escribe algunos libros como clarificación de su conciencia ante confesores y directores espirituales o para ayudar en el camino espiritual a petición de superiores y de sus hermanas carmelitas. El Libro de la vida o Autobiografía es una radiografía de su vivencia interior en busca de Dios. En esta búsqueda se aferra con pasión cordial al Cristo “hombre”, que se convierte para ella en “libro vivo”.


16. Las obras de Teresa de Jesús son fundamentalmente relatos de sus experiencias
místicas. Estas serán el paisaje de fondo de sus primeros escritos: especiales gracias
cristológicas (cf. V 26-27; 37,4) y gracias antropológicas que le otorgan una nueva
comprensión de sí misma o del paisaje del alma (cf. ib. 40,9). Estas experiencias
tienen un marcado carácter dinámico: desde la contemplación se ve urgida a fundar un
Carmelo y a escribir (cf. ib., pról.,2; 37,1). Para decidirse a redactar el primero de sus
libros, Vida (1562 y 1565), recibe la orden de sus asesores, muy implicados en sus
experiencias místicas, pero a la vez ella misma se dice movida por uno de esos
impulsos interiores (cf. ib. 18,8; 19,3-4) . El Camino (1566) lo escribe más bien por
reclamo intenso del grupo recién fundado en San José que sabe de sus gracias místicas
y, en cierto modo, quiere entrar en sintonía experiencial con la Madre. Cinco o seis
años después (1573) emprende la redacción del Libro de las Fundaciones. Prosigue así el relato comenzado en V 32-36, porque se lo ha ordenado el confesor P. Ripalda, pero ha intervenido también el impulso místico (cf. F pról.; CC 6,2). Por fin en 1577 compone las
Moradas. Lo mismo que el de las Fundaciones, también este último libro
empalma con Vida, no en el relato narrativo (V 32-36), sino en el místico (ib. 22-31;
37-40). Lo escribe para completar el panorama de experiencias interiores, de suerte
que sirvan como paradigma del proceso de toda vida espiritual cristiana.

sábado, 23 de abril de 2011

La Cruz de Teresa de Jesús


En la cruz esta la vida
Y el consuelo,
Y ella sola es el camino
Para el cielo.
En la cruz esta el Señor
De cielo y tierra
Y el gozar de mucha paz,
Aunque haya guerra,
Todos los males destierra
En este suelo,
Y ella sola es el camino
Para el cielo.
De la cruz dice la Esposa
A su Querido
Que es una palma preciosa
Donde ha subido,
Y su fruto le ha sabido
A Dios del cielo,
Y ella sola es el camino
Para el cielo.
Es una oliva preciosa
La santa cruz,
Que con su aceite nos unta
Y nos da luz.
Toma, alma mía, la cruz
Con gran consuelo,
Y ella sola es el camino
Para el cielo.
Es la cruz el árbol verde
Y deseado
De la Esposa que a su sombra
Se ha sentado
Para gozar de su Amado,
El Rey del cielo,
Y ella sola es el camino
Para el cielo.
El alma que a Dios está
Toda rendida,
Y muy de veras del mundo
Desasida
La cruz le es árbol de vida
Y de consuelo,
Y un camino deleitoso
Para el cielo.
Después que se puso en cruz
El Salvador,
En la cruz esta la gloria
Y el honor,
Y en el padecer dolor
Vida y consuelo,
Y el camino mas seguro
Para el cielo.
Santa Teresa de Jesús

miércoles, 13 de abril de 2011


Cuando Teresa habla de Jesucristo se refiere al Viviente, a Alguien que le habita en su alma. Para ella, Jesucristo es una persona que la invita a dejarse amar por El, a dejarse vivificar por su gracia.
A nuestra Santa le sale al encuentro el mismo Jesucristo que se le apareció a San Pablo, en el camino de Damasco. Para San Pablo la conversión consistió en percatarse de que era perseguido en lugar de perseguidor. Este hombre se vió acosado por una fuerza personal, por un nombre que en el instante quebró todas las seguridades de su existencia y aglutinó toda la luz de certeza , de bondad y de verdad, necesarias para seguir existiendo. Este mismo es el Cristo de Teresa: el Cristo viviente, el que muerto y resucitado, ha sido constituido por Dios principio y ejemplar de un vivir nuevo, el primogénito de la nueva creación y garantía de una humanidad redimida. Presencia sustentadora de un nuevo vivir, que es el vivir en cristiano. Y en las vivencias del amor hay grados de intensidad y de entrega. En Santa Teresa se fue dando progresivamente hasta llegar a la donación total. Mons. Nicolás González

viernes, 8 de abril de 2011


Enrica Rosana: “Santa Teresa, el primer germen de la conciencia femenina” Roma-Italia (01-04-2011).-


“Teresa es siempre y sobre todo una mujer dotada de una personalidad que prorrumpe, innovadora y rebelde”, afirma la Subsecretaria de la Congregación vaticana para los Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica, la religiosa Hija de María Auxiliadora, Enrica Rosanna.


Bajo el título “Teresa, una mujer, simplemente una mujer”, sor Enrica reflexiona en la última Carta Semanal publicada en la web de preparación al V Centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús www.paravosnaci.com y afirma sentirse fascinada por “la autenticidad humana” de la mística castellana.


Centrándose especialmente en el aspecto femenino, señala que Santa Teresa “es una gran mujer que no habría aceptado nunca caminar un paso por detrás de un hombre mortal”. Con una clara conciencia de su “humanidad femenina” expresada al comienzo del Camino de Perfección, la religiosa salesiana descubre en sus palabras “el primer germen de la conciencia femenina y el primer impensable anhelo de emancipación femenina”.